Los pellets de madera se han convertido en una solución viable y sostenible para generar energía renovable, una alternativa real a los combustibles fósiles. A nivel global, la producción de pellets ha crecido sustancialmente desde 2005, alcanzando un pico en 2022. Europa sigue siendo el mayor productor y consumidor, mientras que Asia está aumentando rápidamente su consumo, especialmente en Japón y Corea, lo que demuestra la expansión y diversificación del mercado. Un mercado que también ha demostrado una notable capacidad de adaptabilidad y resiliencia en los últimos dos años.

El diagnóstico realizado durante el evento EPF 2024 pretende identificar y evaluar los factores críticos que afectan a la industria y sus implicaciones futuras para poder actuar en consecuencia y garantizar un crecimiento sostenible y sólido en los próximos años.

Fortalezas: calidad, innovación tecnológica y sinergias

Una de las principales fortalezas del actual mercado del pellet es la alta calidad del producto, garantizada por esquemas de certificación como ENplus®, que aseguran a los consumidores que están adquiriendo, además, un biocombustible sostenible y con una trazabilidad contrastada de toda la cadena de suministro.

Agnieszka Jankowska, responsable de certificación y control del fraude en Bioenergy Europe, puso de relieve algunas de las importantes aportaciones del sello ENplus® en este sentido como las inspecciones anuales y los muestreos sorpresa a fabricantes y distribuidores, orientados a vigilar la calidad. Por otra parte, ENplus® persigue de forma metódica el fraude, protegiendo los derechos del consumidor y asegurando que los pellets certificados cumplen con los estándares de calidad establecidos. Además, la infraestructura europea para almacenar y distribuir pellets ha mejorado sustancialmente tras la crisis de 2022 y muchas empresas han reforzado sus redes logísticas para asegurar una entrega rápida y fiable.

El compromiso con la innovación tecnológica continua es otra virtud del mercado; Ingwald Obernberger, investigador jefe en la Universidad Tecnológica de Graz, puso de relieve los últimos avances en combustión, que han permitido alcanzar emisiones casi nulas de CO, OGC y partículas. Además, el uso de catalizadores y mejoras en las geometrías de las cámaras de combustión han reducido significativamente las emisiones de NOx. Es importante resaltar que se trata de innovación “made in Europe”, un factor que refuerza la autonomía energética del continente.

Obernberger señaló la necesidad de apoyar el reemplazo de equipos obsoletos por otros que incorporen las mejores tecnologías disponibles y apuntó que en los próximos años, la i+D centrará esfuerzos en lograr estufas de baja potencia con emisiones cero y en seguir reduciendo las emisiones de NOx.

Otro aspecto muy relevante es la sinergia del mercado del pellet con la gestión forestal sostenible y la lucha contra los incendios forestales. Como ejemplo, Canadá, donde la reducción de los aprovechamientos de madera ha coincidido con un aumento de las emisiones por incendios forestales, subrayando la necesidad de una gestión activa de los bosques, como señaló Jamie Stephen, director de Torchlight Bioresources.

También se destacó la capacidad del mercado del pellet para complementar de forma sostenible y eficiente la electrificación que ansía la UE para la generación de calor en edificios de nueva construcción, aportando estabilidad y una menor dependencia de los combustibles fósiles.

Debilidades: fluctuaciones en el precio de la biomasa y percepción pública

Analizar las áreas críticas que el mercado del pellet debe pulir para asegurar su crecimiento y sostenibilidad a largo plazo es fundamental. Entre las debilidades más destacadas figuran la escasa diversificación de materias primas, la gestión de la percepción pública y la estabilidad de los apoyos políticos y financieros.

En la actualidad, la producción de pellet depende en gran medida de la biomasa de coníferas, cuya disponibilidad podría verse limitada en determinados países. Movilizar biomasa de frondosas, mucho menos utilizada hoy en día, puede ser necesario, aunque los costes de inversión y operativos son elevados por el mayor consumo energético requerido para procesos como el secado, el transporte y la granulación de este tipo de madera. Esto puede limitar la capacidad de la industria para diversificar sus fuentes de materia prima.

En 2022, el mercado del pellet sufrió una insólita y significativa fluctuación de precios debido a la crisis energética global, mostrando que no está exento de volatilidad, lo que puede desalentar su adopción como tecnología para calefacción o en usos industriales. Gilles Gauthier, experto en mercados de biomasa en Hawkins Wright, señaló que la transferencia de pellets entre los mercados de calefacción e industrial puede ser complicado debido a las diferentes especificaciones y certificaciones requeridas en cada caso; situación que limita la flexibilidad del mercado en situaciones como la vivida entonces.

La dependencia de subsidios gubernamentales y de políticas de apoyo también representa una debilidad, que puede crear incertidumbre entre los inversores y los consumidores.

La gestión de la percepción pública del mercado del pellet se señaló como otra debilidad del sector. Compuesto en la mayor parte de la cadena de suministro por pymes, los recursos que el sector invierte en comunicación son escasos y a menudo sin capacidad para contrarrestar de forma contundente algunas imágenes incorrectas y de carácter negativo que se difunden como que los pellets son una tecnología antigua y contaminante o que la obtención de las materias primas no es sostenible.

Es vital aumentar el esfuerzo en educar a los consumidores sobre las prácticas de gestión forestal sostenible ligadas a la producción de los pellets y los avances tecnológicos relacionados con la combustión, cada vez más eficiente y limpia, en los dispositivos modernos. En cualquier caso, Elizabeth Woodworth, de Wood&co, mostró los resultados de una reciente encuesta que indicaban que entre el 18 y el 60% de las personas no sabían qué era o se mostraban neutrales ante la biomasa; es decir, no existe tanta oposición como a veces se percibe desde el sector de la bioenergía.

Amenazas: regulaciones excesivas, competencia injusta y cambio climático

Entre las amenazas a la estabilidad y al crecimiento a largo plazo del mercado del pellet europeo, una de las más llamativas es la implementación de regulaciones desde Bruselas relacionadas con la eficiencia energética y las emisiones, y con la trazabilidad de la madera utilizada en la producción de pellets, que aumentan los costes de producción, añaden carga burocrática a los productores de pellets y los sitúan en desventaja frente a otras tecnologías.

Jean Marc Jossart, secretario de Bioenergy Europe, se refirió sobre todo a dos reglamentos, el nuevo EUDR sobre productos libres de deforestación y a la revisión del reglamento de Ecodiseño y Etiquetado Energético.

Sobre el EUDR, Jossart trasladó algunas preocupaciones del sector como el escaso plazo de implementación de apenas un año desde junio de 2023 y la complejidad y el coste que supondrá a los fabricantes de pellet, sobre todo a los más pequeños, implantar sistemas de trazabilidad de la madera utilizada en la producción de pellets. Los productores deben monitorear continuamente que sus proveedores de madera cumplen con los requisitos de sostenibilidad y geolocalización, lo que puede violar la privacidad y la confidencialidad y supone un aumento significativo de la carga administrativa.

La revisión del reglamento Ecodiseño añade nuevos requisitos de eficiencia energética y bajas emisiones, lo que sin duda espoleará la I+D del sector de los equipos de combustión con biomasa. Sin embargo, desde Bioenergy Europe ven como amenaza la propuesta de incluir las estufas de pellet en la misma categoría que las bombas de calor eléctricas y los calentadores eléctricos. Con una eficiencia del 97%, las estufas de pellet no podrían competir con las bombas de calor, cuyo rango de eficiencia se ha convenido que se sitúe entre el 276% y el 281%.

Bioenergy Europe ha reclamado que estas tipologías de equipos se mantengan en etiquetas separadas para evitar desventajas competitivas injustas. Si se decide agruparlas en el mismo grupo, Bioenergy Europe sugiere que al menos se cambie el SCOP (Coeficiente de Rendimiento Estacional) para nivelar el campo de juego y no dejar a las estufas en una injusta desventaja competitiva y al consumidor con menor capacidad de decisión de compra.

Mark McConnell, director de ventas del gigante Graanul Invest, señaló como amenaza la volatilidad en los precios de los combustibles fósiles y otras fuentes de energía renovable: la competencia con combustibles más baratos u opciones de energía más económicas y accesibles, que pueden desincentivar el uso de pellets en algunos momentos.

Por último, Marco Palazzetti, CEO del fabricante italiano de estufas de pellet del mismo nombre, señaló una de las amenazas más inquietantes: la dependencia del mercado de pellets de las condiciones climáticas. Inviernos más suaves y cambios en los patrones climáticos pueden, sin duda, reducir la demanda de pellets para calefacción.

Oportunidades: consumo industrial, tecnologías innovadoras y diversificación de materias primas

El uso de pellets para producir calor y vapor en aplicaciones industriales y comerciales representa una gran oportunidad. En este ámbito, los pellets se están colocando como una opción energética y sostenible perfectamente viable

En este sentido, John Robinson, representante en Francia de BKTech, un fabricante sueco de pellets convertido en proveedor de soluciones de bioenergía, demostró cómo su empresa está atendiendo las necesidades de industrias con altos requerimientos energéticos de forma confiable y competitiva utilizando pellet certificado ENplus®.

Robinson también puso de relieve el hecho de que la producción global de pellets crece de forma constante lo que garantiza un suministro estable y permite establecer contratos confiables a largo plazo con industrias y comunidades.

Las fábricas de pellet pueden adoptar tecnologías avanzadas ya disponibles que les permiten mejorar la eficiencia de sus procesos y abaratar costes. En el evento, Turboden presentó sus los módulos ORC (Organic Rankine Cycle), que combinan la producción de calor y electricidad, y Saalasti su equipo de deshidratación mecánica, que permite reducir el contenido de humedad de la biomasa antes del secado térmico.

Aunque no exenta de dificultades, la diversificación de materias primas para la producción de pellets, incluyendo residuos agrícolas y coproductos, constituye una oportunidad, como expuso Xavier Collin, gerente de biomasa de IDEX, empresa encargada de proveer de calor y agua caliente sanitaria a los edificios de La Defense, en Paris, desde 2002. Tras valorar las materias disponibles en 150 km a la redonda, decidieron emplear pellets mixtos de biomasa leñosa y de paja y otros subproductos agrícolas. De esta manera, promueven el uso de recursos locales y reducen la dependencia de la madera.

Un futuro prometedor con proactividad

En resumen, asegurar el crecimiento y la sostenibilidad del mercado del pellet, exige proactividad por parte del sector. Por ejemplo, diversificar las materias primas. Al invertir en tecnologías para aprovechar biomasa de frondosas y residuos agrícolas, podemos rebajar nuestra dependencia de la biomasa de coníferas y estabilizar la oferta de pellets en el futuro.

Además, es fundamental seguir impulsando la innovación tecnológica. Mejorar la eficiencia en la producción y las tecnologías de combustión permitirá mantener la competitividad, a la par que se reducen aún más las emisiones. La percepción pública es otra área crítica. Campañas bien concebidas y ejecutadas pueden informar a los consumidores sobre los beneficios de los pellets y las prácticas sostenibles, mejorando así la aceptación pública.

Es igualmente importante seguir colaborando con los legisladores para asegurar que las regulaciones sean justas y beneficiosas para nuestro sector. Fortalecer el apoyo político y financiero nos proporcionará la estabilidad económica necesaria y fomentará la inversión. También debemos seguir promoviendo el uso de pellets en aplicaciones industriales y comerciales y los contratos a largo plazo, lo que diversificará la demanda y aumentará la estabilidad del mercado. Y transmitir que los pellets son una forma barata de almacenamiento de energía y por tanto un excelente complemento a la electrificación de las necesidades de calor.

El mercado del pellet en Europa y el mundo tiene un futuro prometedor si se abordan los desafíos de forma proactiva y se aprovechan las oportunidades. La colaboración y buen entendimiento entre la industria, los legisladores y los consumidores son la base para asegurar un crecimiento sostenible y consistente en los próximos años.

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Integrantes de la mesa sobre fortalezas del mercado del pellet durante el Foro Europeo del Pellet 2024. De izquierda a derecha: Ingwald Obernberger, investigador jefe en la Universidad Tecnológica de Graz, Austria; Jeremie Geelen, director de estudios de mercado en Bioenergy Europe; Jamie Stephen, director de Torchlight Bioresources; Agnieszka Jankowska, responsable de control del fraude en Bioenergy Europe; y Gilles Gauthier, experto en mercados de biomasa en Hawkins Wright.

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