El uso de la biomasa con fines energéticos en Castilla y León se verá impulsado de manera sustancial gracias a las medidas contra el cambio climático que la Junta ha acordado aprobar a partir de 2020.
Entre las 10 medidas incluidas en el Acuerdo 26/2020, de 4 de junio, la tercera indica que la biomasa es la fuente de energía de referencia para calentar los edificios administrativos en sustitución de los combustibles fósiles.