Concluye el proyecto AgroSyngas, que demuestra el potencial de la biomasa agroforestal para generar energía limpia
El grupo operativo andaluz AgroSyngas ha desarrollado experiencias piloto para valorizar biomasa de cultivos leñosos y residuos forestales, transformándola en pellets para calefacción de invernaderos y en gas combustible para microgeneración eléctrica. Los ensayos han demostrado el potencial del autoabastecimiento energético en explotaciones agrícolas y marcan un camino hacia un modelo de bioeconomía circular en el medio rural.
Dos años de ensayos han servido al proyecto AgroSyngas para obtener interesantes conclusiones sobre un modelo de bioeconomía circular en la zona norte de Granada. Desde cultivos energéticos leñosos, capaces de alcanzar hasta 59 toneladas de biomasa seca por hectárea en turnos de cuatro años, hasta la fabricación eficiente de pellets y su gasificación en un sistema con un 64% de eficiencia, que produce un syngas limpio para generar electricidad y energía térmica para invernaderos.
Durante más de dos años se han ensayado cultivos energéticos leñosos en la zona norte de Granada, destacando el buen comportamiento de clones de Populus x euramericana, Robinia pseudoacacia y Ulmus pumila, capaces de alcanzar entre 49 y 59 toneladas de biomasa seca por hectárea en turnos de 4 años, con balances económicos y de carbono positivos. Además, se ha comprobado que estos cultivos permiten usos múltiples, como el pastoreo de ovino para control de malas hierbas, y que la biomasa obtenida cumple con los estándares internacionales de calidad para pellets (ISO 17225-2, categorías ENplus A2, B o Industrial).
El proyecto también ha demostrado que los tratamientos selvícolas en pinares de repoblación mejoran la masa forestal, la fertilidad del suelo y contribuyen al secuestro de carbono, además de reducir riesgos por incendios, aunque su rentabilidad económica es limitada y requeriría apoyo público para su implantación a gran escala.
En la línea industrial, se ha analizado la fabricación de pellets, donde el secado representa el mayor consumo energético (≈14% del total) y la huella de carbono ronda los 200 kg de CO₂ por tonelada producida. Por otro lado, en los invernaderos hortícolas se ha demostrado que la combinación de calefacción, aporte de CO₂ e iluminación LED interlighting aumenta la producción y mejora la eficiencia en el uso del agua.
Uno de los hitos más relevantes ha sido el diseño y construcción de un gasificador de flujo descendente, que ha logrado una eficiencia del 64%, con un consumo de 3 kg/h de pellets de madera de pino y la obtención de un syngas limpio, bajo en alquitranes, con un 21,5% de CO, 4,4% de H₂ y 2,5% de CH₄.
Dos empresas asociadas a AVEBIOM han tenido un papel destacado. TUBOCÁS, socio beneficiario, se ha encargado de la coordinación técnica y ha aportado su experiencia en la producción de pellets y en soluciones de calor con biomasa. Vertex Life, socio colaborador, ha participado en el diseño y pruebas de equipos de gasificación y en la transferencia de resultados, en colaboración con la Universidad de Granada.
Descargar Informe