Serbia: calefacción con sabor a fresas
Una instalación térmica ubicada en el centro de salud de la localidad serbia de Arilje aprovechará restos de la producción de bayas como biocombustible.
La construcción de la sala de calderas de calefacción comenzará en junio y utilizará biomasa procedente en un 70% de materiales forestales provistos por la empresa pública Srbijasume y en un 30% de restos de la producción de fresas y moras.
Los ahorros serán importantes, ya que en este momento el municipio utiliza mazut (combustible pesado de baja calidad), carbón y fuelóleo.
La Oficina de Gestión de la Inversión Pública ha impulsado el proyecto para sustituir calefactores y construir pequeñas redes de calor con biomasa para abastecer de energía a instalaciones públicas en varias ciudades y municipios de Serbia.
En este caso, el contrato se adjudicó en abril por 1,5 millones de euros a una oferta conjunta de las empresas IsoPlus, Adriacore, Oden, TVI, Global 100Solutions y Termo Univerzal de Belgrado, GasTeh de Indjija y Giles Energie-und Umwelttechnik GmbH & Co KG Gmuden de Austria.
De todas las fuentes renovables de energía en Serbia, la biomasa es la de mayor potencial para aumentar el mix energético renovable del país. El gobierno serbio planea continuar sustituyendo los combustibles fósiles por biomasa en otras ubicaciones. Seis redes de calor recientemente licitadas deberán entrar en operación antes de enero de 2022.
